Desestructurado con la inocencia del mas fino y naif mogólico, Alcides aleteaba por sobre su nido que torpemente cuidaba. Era un reaseguro del convencimiento de continuidad de su infinita prestancia hacia la tranquilidad de la concrecion del dia a dia.
Su agitación por la ansiedad que le producia el poder perderlo todo lo llenaba de miedo andrenalinico.
Alcides no tenia hijos, solo su nido.
Desde la plenitud de sus recreos en la vigilancia de su adictiva sensacion de propiedad, creaba y asimilaba mundos y fantasias de libertad placenteras que de alguna forma cubrian el desgaste que le producia su paranoia.
Alcides cuidaba su propiedad privada.
peguense un tiro
ResponderEliminarEso es una cotorra, ¿no? La madre que las parió.
ResponderEliminary tanto se preocupo por cuidar la propiedad que desarrollo un gran sentido de pertenencia con valores y principios que no pudieron trascender por no haber tenido hijos, ya que su nido no los apreciaba
ResponderEliminarGran giro! El pensar en un rechazo del nido por sobre el combo de razones por las cuales no tuvo hijos. Compro.
ResponderEliminaryo necesito un tiro, ahora hay gente que dice corchazo...
ResponderEliminarsalud
La cosa si debe terminar que termine, y si debe seguir que siga, dejar de masturbar al gatillo y cojerselo de una vez.
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